Fabián Gauseño

quarta-feira, 19 de maio de 2010

IMPORTACIONES BAJO LA LUPA: LOS EMPRESARIOS DEL PRINCIPAL SOCIO COMERCIAL DESCREEN QUE LA FLEXIBILIZACION SEA DURADERA
Argentina empezó a levantar las barreras a productos de Brasil
Durante el fin de semana, se liberó el ingreso a camiones que transportaban pollos y otros alimentos. Dicen que fue para bajar el tono a la polémica durante el viaje de Cristina a la cumbre entre Europa y el Mercosur. Y para evitar represalias.
Por: Eleonora Gosman Fuente: San Pablo. Corresponsal

Así como llegó en silencio, sin que mediara comunicación oficial de gobierno a gobierno, la medida verbal del secretario de Comercio Guillermo Moreno -quien avisó que se restringirá el ingreso de alimentos procedentes de Brasil similares a fabricados en Argentina- ingresó en vías de ser levantada. Hubo un gesto de liberar camiones que transportaban productos avícolas hacia Buenos Aires y que estaban detenidos en la frontera. Pero fuentes empresariales de la capital paulista dijeron a este diario que aún no desaparecieron todos los problemas. Lo que había, señalaron a esta corresponsal, fue una decisión de bajar el tono de la polémica mientras dure la cumbre de Mercosur y Unión Europea, en el marco de la cita América Latina-Europa ocurrida en Madrid, para retomar las negociaciones de libre comercio entre ambos bloques. En San Pablo cuestionan la "falta de sentido de oportunidad" del gobierno argentino de haber planteado el freno a importaciones de alimentos, tanto de Europa como de Brasil, apenas una semana antes de realizarse esa cita entre las dos partes, luego que las discusiones comerciales fueran congeladas en 2004. En los entornos de la Federación de Industrias del Estado de San Pablo no ocultaron su extrañeza respecto de las declaraciones de la presidenta Cristina Fernandez de Kirchner quien en Madrid negó la existencia de restricciones comerciales.Desde la semana pasada, la FIESP reclamaba en forma insistente que Argentina había puesto barreras a productos brasileños sin siquiera avisar a las autoridades nacionales. Hasta el canciller Celso Amorim debió salir a expresar la preocupación que causaban esas trabas. Y el ministro de Desarrollo e Industria Miguel Jorge tuvo que comunicarse con su colega Débora Giorgi para saber de qué se trataba y reclamar por camiones de comestibles perecederos que estaban frenados. Las autoridades aduaneras el sábado pasado levantaron, literalmente, las barreras. Pero los empresarios temen para la falta de garantías: "No sabemos si el gobierno argentino no volverá a aplicar ese tipo de restricciones".Ayer, en Madrid, Cristina Kirchner negó que existan bloqueos informales contra alimentos europeos y brasileños. En efecto no hubo papeles, ni siquiera circulares internas. Pero sí una charla entre Moreno y los mayoristas de alimentos cuyos términos trascendieron inmediatamente. En esa conversación el secretario de Comercio había advertido a los grandes supermercados que debían eliminar de las góndolas productos enlatados o congelados que pudieran desplazar a las marcas nacionales. Se habló de latas de tomates italianas, de aceites vírgenes españoles y de granos de choclo brasileños. También se supo que habían caído en desgracia aves y sus derivados, lo que afectaría a sectores muy poderosos de la industria paulista. A estos sectores pertenecían los camiones cuyo paso fue liberado durante el fin de semana. Y también pasaron choclos en lata y carnes elaboradas.Lo cierto es que no solo protestó Brasil. También la Unión Europea criticó en un comunicado las obstrucciones argentinas. Ayer, la Presidenta -que tiene la misión de conducir las negociaciones con la Unión Europea hasta julio próximo por ser la titular pro tempore del Mercosur- se defendió en forma indirecta al señalar que el "proteccionismo no está solo en las aduanas y en los puertos" sino también en los subsidios de los gobiernos a los productores domésticos. Es la queja principal que enarbola la Argentina contra Europa, y también contra Brasil. Esto es lo que abona el temor empresarial brasileño, especialmente en San Pablo, donde descreen de un retroceso argentino durable respecto de las trabas a los alimentos importados.
Fuente: http://www.clarin.com/diario/2010/05/18/elpais/p-02196928.htm

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